Pasos. Miradas cruzadas. Escaleras. Levanto la cara: si me miran respondo, dignidad.

-Buenos días
-Hola, buenos días- sonrío.

escalones, silencio.

-¿Cómo te llamas?
-..A.
-..A.... qué nombre tan bonito.
-Gracias (vuelvo a sonreír). ¿Y tu cómo te llamas?
-G... ¿Vas para clase?
-No, no tuve.
-Yo estoy haciendo una exposición.
-Ah...

El fin de los escalones indica el fin de la (nula) conversación. Cada uno para su lado.

(me gusta su mirada)

Lo nuestro duró lo que duran dos peces de hielo en un whisky on the rocks...

Hoy me levanté pasmada., extrañamente mareada, con una imposibilidad casi absoluta para comunicarme con el exterior. Sentía que me estrellaba torpemente contra las paredes. La mañana estaba preciosa cuando salí para clase tras fallar en mi propósito de salir de la cama temprano y trabajar antes (lo que terminó en una hora más de sueño luego del baño y el desayuno). La mañana estaba preciosa y yo no me sentía acorde con el día... sin embargo, veía todo de una manera distinta y sentí que aquel pasmo anunciaba transformación, una transformación en mí que me haría ver el mundo definitivamente de otro modo.

En el bus pensaba sobre el hecho-problema del habitar y la insoportable casa (¿de Mies Van de Rohe?) de la que nos hablaron hace unos días. Pero relacionando (desde la ignorancia) este hecho con la ciudad: HABITAR la CIUDAD... Mientras empezaba la clase me puse a escribir:

Me pregunto si alguien aquí tendrá claro lo que quiere. Si alguien es capaz de vivir por ALGO, siendo consciente, al tiempo, de lo insignificante que es, de lo insignificantes que somos en un infinito irresistible.

En realidad, y sobre todo hoy, odio lo que escribo. El existencialismo barato me penetra y habla por mí, incapaz (yo) de encontrar palabras para el vacío, para la nada que me acuchilla la garganta. Recuerdo al cíclope gritando en la cueva: ¡Amigos, Nadie me mata (...)!

Y entonces empezó un superficial monólogo sobre el sistema hidráulico. Pero aquello se me quedó en la cabeza... junto a otras palabras ajenas: Ese extraño en la ciudad es el ciudadano por excelencia.

El comentario me sorprendió:

-Esta niña tiene una cara de cínica que no puede con ella.

Pero si sólo soy un poco irónica...

PREGUNTAS A LA HORA DEL TÉ

Este señor desvaído parece
Una figura de un museo de cera;
Mira a través de los visillos rotos:
Qué vale más, ¿el oro o la belleza?,
¿Vale más el arroyo que se mueve
O la chépica fija a la ribera?
A lo lejos se oye una campana
Que abre una herida más, o que la cierra:
¿Es más real el agua de la fuente
O la muchacha que se mira en ella?
No se sabe, la gente se lo pasa
Construyendo castillos en la arena.
¿Es superior el vaso transparente
A la mano del hombre que lo crea?
Se respira una atmósfera cansada
De ceniza, de humo, de tristeza:
Lo que se vio una vez ya no se vuelve
A ver igual, dicen las hojas secas.
Hora del té, tostadas, margarina.
Todo envuelto en una especie de niebla.

Nicanor Parra

Sometimes I think that the virtual life sucks after awhile... Does someone else feel it?

...There is something in the air...

Me mandaron al sexto infierno...

The Dante's Inferno Test has banished you to the Sixth Level of Hell - The City of Dis!
Here is how you matched up against all the levels:

Level	Score
Purgatory (Repenting Believers)	Very Low
Level 1 - Limbo (Virtuous Non-Believers)	Low
Level 2 (Lustful)	High
Level 3 (Gluttonous)	Moderate
Level 4 (Prodigal and Avaricious)	Moderate
Level 5 (Wrathful and Gloomy)	Moderate
Level 6 - The City of Dis (Heretics)	Very High
Level 7 (Violent)	Very High
Level 8- the Malebolge (Fraudulent, Malicious, Panderers)	Very High
Level 9 - Cocytus (Treacherous)	Low

Take the Dante's Inferno Hell Test

cero y van tres (viernes santos bizarros (además viernes santos...))

ALMA DESNUDA

Soy un alma desnuda en estos versos,
Alma desnuda que angustiada y sola
Va dejando sus pétalos dispersos.

Alma que puede ser una amapola,
Que puede ser un lirio, una violeta,
Un peñasco, una selva y una ola.

Alma que como el viento vaga inquieta
Y ruge cuando está sobre los mares,
Y duerme dulcemente en una grieta.

Alma que adora sobre sus altares,
Dioses que no se bajan a cegarla;
Alma que no conoce valladares.

Alma que fuera fácil dominarla
Con sólo un corazón que se partiera
Para en su sangre cálida regarla.

Alma que cuando está en la primavera
Dice al inviemo que demora: vuelve,
Caiga tu nieve sobre la pradera.

Alma que cuando nieva se disuelve
En tristezas, clamando por las rosas
Con que la primavera nos envuelve.

Alma que a ratos suelta mariposas
A campo abierto, sin fijar distancia,
Y les dice libad sobre las cosas.

Alma que ha de morir de una fragancia,
De un suspiro, de un verso en que se ruega,
Sin perder, a poderlo, su elegancia.

Alma que nada sabe y todo niega
Y negando lo bueno el bien propicia
Porque es negando como más se entrega,

Alma que suele haber como delicia
Palpar las almas, despreciar la huella,
Y sentir en la mano una caricia.

Alma que siempre disconforme de ella,
Como los vientos vaga, corre y gira;
Alma que sangra y sin cesar delira
Por ser el buque en marcha de la estrella.

Alfonsina Storni

(...)
-Debes tener mucho éxito con los chicos, a mí me pareces muy guapa.
- Mmm... no, no tanto. (...) Y si sí no me doy cuenta.
-No te creo.
-Bueh... Me caen mal.
- (¿?)

(...)

-¿Y tú?, ¿tienes muchas novias?
- No, yo ya no quiero tener novias.
-¿Por qué?
-Me caen mal.

((...): intervalo incontable)

-¿Y si tuviéramos la misma edad cómo sería?, ¿nos gustaríamos?
-Mmm... No tengo la menor idea... ¿Tú qué crees?
-No sé. Lo estaba pensando pero no se me ocurre nada.

(silencio de tele prendida.)

((...): horas de lluvia un poco prostitutas. se acerca el fin.)

-¿Qué haces mañana?
-Dibujar.
-Yo tengo un almuerzo familiar.
-Ah.
-Pero mis almuerzos familiares son largos.
-Mis dibujos también son largos.
-Me voy el domingo para (...).
-¿Y cuándo vuelves?
-No sé, quizás alcance a regresar el (...), si no la otra semana.
-Ya.
-Igual te llamo desde (...).
-Va.

((...): y en fin. lluvia infinita y fin.)

...de hecho lo es...